Ese sueño de calma

Dejarse atravesar

Casa Villa Julia es una histórica casa de estilo pintoresquista que inició su construcción en 1908, sobre un terreno adquirido por el Ing. Carlos Maschwitz El profesional ocupó el cargo de Ministro de Obras Públicas de la Nación durante la presidencia de José Figueroa Alcorta. La que se convertiría en Casa Villa Julia, fue una obra proyectada por Maschwitz como casa de veraneo, en la zona elegida por muchos porteños para construir grandes residencias de descanso.

Corría el mismo tiempo en el que se fundaban los primeros clubes de remo, esas magnificas construcciones de la Belle Epoque, entre las que se encontraba el Tigre Club, hoy Museo de Arte Tigre (MAT).

Durante 1914 se finalizó el primer tramo de la construcción de la casa. Los materiales utilizados, que fueron traídos de Europa, aun se conservan. Los pisos de roble de Eslavonia, mosaicos, molduras, azulejos esmaltados, la herrería y sus dos encantadores vitrales son algunas de las piezas que pueden deslumbrar a los visitantes. A través del tiempo pasó por diferentes propietarios que han preservado su riqueza arquitectónica. Tuvo diversos destinos: fue residencia familiar, petit hotel, restaurant y casa de té. Siempre despertó interés entre los visitantes y vecinos, se convirtió en un punto de referencia local.

Cuando los antepasados vienen a vos desde la ambientación percibís el sentido. Existe algo que fue y que hoy te cobija. Una pared que te revela el mapa de su tiempo. Un sillón que te cuenta al oído las travesuras de las infancias pasadas. Una madera que registró las hendiduras del tiempo. Pero, al lado, el color alocado que predice las aventuras de hoy. La luz que revela lo nuevo que será futuro. Los detalles que alumbran aquello que te pone el pasado vivo, hoy, con nuevos bríos y ganas de seguir siendo. Las combinaciones de estética y recursos que en Casa Villa Julia se combinan como en una sinfonía que toca una melodía con historia en una guitarra eléctrica.