Increiblemente, diciembre ya está a la vuelta de la esquina y ya con la pandemia detrás, brotan los sueños y planes para armar un próximo viaje. Por qué no, aprovechar las fiestas para realizar un viaje que nos permita presenciar las celebraciones navideñas y entender otras culturas del mundo?
Te traemos una idea de las muchas que hay para transportarse y vivir ese fin de año que venimos soñando.
Pocos países irradian más la magia del invierno que Suiza. En este paraíso alpino de montañas nevadas, encantadoras casas de madera, coloridos pueblos y aldeas se crea un maravilloso ambiente festivo y una perfecta escena prenavideña.
Te mostramos aquí los distintos mercadi- tos navideños que podés conocer y un re- corrido para tu alma festiva: El increible Château-d’Oex, Montreux y su colorido mercado navideño ubicado a lo largo de la costa del lago de Ginebra, es un planazo que podés y tal vez una excursión a la exquisita capital suiza Berna, en el corazón del pintoresco Oberland bernés.
Nuestra propuesta navideña, para luego seguir tu viaje a las cercanas Bélgica o Francia es:
Volá a Ginebra desde donde estés, y tomá un auto para trasladarte aprox dos horas al maravilloso pueblo Château-d’Oex. Bellamente ubicado en un amplio valle entre los altos Alpes del Oberland bernés y las orillas del lago de Ginebra, este encantador complejo fue el hogar de la leyenda del cine británico David Niven, y tiene una encantadora selección de tiendas, restaurantes, cafés y bares, un fascinante museo popular e incluso un centro de elaboración de queso. Instálese en su hotel y, dependiendo de su hora de llegada, tal vez dé un paseo por el pueblo antes de que se sirva la cena.
Luego de descansar, sugerimos te tras- lades tan sólo una hora a Montreux en el lago Lemán, donde te esperará un mágico mercado navideño en una ciudad tan ele- gante como sofisticada. Los puestos del mercado, dispuestos en y alrededor de la orilla del lago, ofrecen una variedad de productos de producción local, artículos interesantes de todos los Alpes y delicias festivas suizas como el vin chaud y crepes de canela!. También podrás explorar las tiendas de la ciudad, o tal vez hacer una visita al cercano Château Chillon, uno de los monumentos más famosos de Suiza (la en- trada se paga localmente), donde todavía hay más puestos navideños detrás de las antiguas almenas de sus castillos.
Nuestra propuesta: Recorrer la increible Berna. Un viaje que te llevará al corazón del Oberland bernés, pasando por ejemplo como plan, por la exclusiva estación de esquí de Gstaad y el lago Thun, hasta las orillas del río Aare.
Apenas modificada desde la época medie-val, Berna es a menudo considerada como la capital más bella del mundo! Su casco antiguo, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es un laberinto de arcadas y calles empedradas dispuestas alrededor del Zytglogge, el elaborado reloj y la torre que alguna vez fue la puerta occidental de la ciudad. El lugar ideal para sumergirse en la más navideña de las atmósferas y explorar sus mercaditos a la sombra de la imponente catedral Munster. La cercana Waisenhausplatz, será el lugar indicado para realizar una parada gastronómica de temporada, comprar hermosas artesanías y regalos navideños tradicionales.